Las regulaciones débiles sobre el atún continúan poniendo en riesgo los preciosos recursos marinos de Costa Rica

La lucha para impulsar las flotas de pesca comercial a 200 millas de la costa continúa: parte uno de dos

Durante más de dos años, un par de propuestas de ley han estado flotando dentro y fuera del congreso costarricense con respecto a la reforma del atún para las flotas de redes de cerco extranjeras que pescan en la zona económica marina de Costa Rica, que es 11 veces mayor que el área terrestre del país. . Hasta la fecha aún no se ha votado.

Costa Rica no tiene una flota propia de cerco de atún y vende licencias de 60 días a barcos de bandera extranjera para abastecer de producto a la fábrica de conservas de Puntarenas. Extraían 9,000 toneladas anuales para la planta. Esa cantidad se elevó debido a la demanda durante la pandemia a poco más de 11,000 toneladas. Hubo un tiempo en que extraían 25,000 toneladas al año. Un atunero cerquero extranjero extrae más atún en un viaje de 60 días de lo que toda la flota pesquera comercial nacional de 400 barcos extrae en un año.

El Presidente Ejecutivo de Incopesca, Daniel Carrasco, quien rige todas las actividades pesqueras en Costa Rica, asistió recientemente a talleres con diferentes sectores de la pesca deportiva y comercial, representantes de conservas, exportadores de productos del mar y congresistas sobre la propuesta de ley. Recientemente envió sus recomendaciones al viceministro de Agricultura, Marlon Monge, en una carta de 15 páginas al ministro.

La carta cubría cuestiones relativas a varias cosas, incluida la zonificación, los delfines y otras capturas incidentales, las licencias y el establecimiento de una flota nacional de cerco. Dos ítems afectan más a los costarricenses, los delfines y la zonificación. Esta columna no tiene espacio para cubrir 15 páginas artículo por artículo, así que abordaré esos dos.

La carta de Carrasco al Viceministro comenzaba:

“Con el placer de saludarlos, les escribo para dar seguimiento a las sesiones de trabajo que se han realizado para la revisión de los Expedientes Legislativos N ° 21,316 y 21,531, siendo que ambos proyectos contemplan una reforma a la y Ley de Acuicultura (LPA), que promueve el mejor uso del recurso Atún ”.

Al respecto, me permito reafirmar el compromiso del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA) de seguir participando en un proceso tan importante y aportar los insumos necesarios para ayudar a la toma de decisiones para promover la

desarrollo del sector pesquero bajo los principios del desarrollo sostenible; así como orientar las acciones nacionales para lograr una gestión oportuna y eficaz que satisfaga los intereses del país ”.

¡Ah, de verdad!

Un poco de historia: El atún aleta amarilla y varias especies de delfines tienen una relación simbiótica en las aguas del Pacífico de Costa Rica. Nadan juntos. Bancos gigantes de atún con manadas masivas de delfines a veces manadas de delfines por miles.

Hasta 2014, los atuneros extranjeros casi tenían el control de toda la Zona Económica de Costa Rica. Podrían colocar sus redes en aguas enteras de Costa Rica hasta dentro de las 12 millas de la costa, mientras que la mayoría de los sectores de pesca comercial y deportiva nacional están limitados por ley a pescar dentro de las 40 millas de la costa y competir por los mismos recursos.

Costa Rica solo se beneficiaba de $ 37 por cada tonelada de atún extraída por los barcos extranjeros de la venta de licencias. A lo largo de los años, más de 3000 toneladas de captura incidental, la mayor parte muerta, también fueron capturadas y destruidas de nuestras aguas.

Esto incluyó delfines, tiburones, tortugas, mantarrayas, pez vela, marlín y un total de otras 100 o más especies. Además, a lo largo de los años, más de 6 millones de delfines han muerto en el Pacífico tropical oriental en redes de atún. Hoy utilizan un método para liberar a la mayoría de los delfines, pero miles son acosados ​​y capturados una y otra vez cada año. Se estima que alrededor de 2000 mueren anualmente en las redes y nadie sabe cuántos mueren después de ser liberados. Las madres y las crías a menudo se separan y muchas de las crías no pueden sobrevivir solas.

En 2014 se aprobó un decreto que creaba zonas protegidas de la flota atunera por un total de aproximadamente 200,000 kilómetros cuadrados (120,000 millas cuadradas). Incluida en eso estaba una zona costera que se extendía a 40 millas de la costa con una zona de amortiguamiento adicional de 5 millas.

Hace un par de años Carrasco le preguntó a Da. Marina Marrari si Incopesca pudiera justificar el traslado de los barcos atuneros de 45 a 60 millas. Marrari, un Phd es un científico marino y experto en satélites que trabajó para la NASA antes de mudarse a Costa Rica. Había comenzado a recopilar datos de captura de la flota de pesca deportiva y a comparar los registros de captura antes y después del decreto de atún de 2014 dentro del área protegida costera de 40 millas.

En ese momento era consultora privada y hoy es Directora Ejecutiva de la Federación Costarricense de Pesca. (Federación Costarricense de Pesca) También señaló en su informe que había dos “subespecies” de delfines que vivían principalmente a 60 millas de la costa y una zona de amortiguamiento de 60 millas protegería a esas dos subespecies.

Marrari ha continuado su investigación durante los últimos dos años y concluyó que trasladar los barcos atuneros a más de 60 millas es una idea mucho mejor. Carrasco decidió incluir solo sus resultados preliminares de dos años en la carta de recomendación de Incopesca en lugar de los datos más recientes que se han presentado públicamente muchas veces y muestran que 60 millas no son suficientes.

La ley de reforma del atún ha entrado y salido de sesión en el congreso y en ese tiempo otros grupos han tenido tiempo de opinar sobre el tema. Aunque la recomendación de Incopesca al Congreso es mover los barcos atuneros solo a 60 millas, ellos y tal vez la industria atunera son los únicos grupos que piensan que eso es suficiente.

El sentimiento de los diferentes grupos de pesca y conservación va desde mover las embarcaciones de 100 a 200 millas de la costa hasta no permitir en absoluto la pesca con redes de delfines en la industria del atún con red de cerco. Más del 80% de los lances con redes en Costa Rica por barcos atuneros rodean actualmente las manadas de delfines.

Continuaba la carta de Carrasco al Viceministro, “Pesca incidental e impacto en otras especies que se pescan con atunes. La pesca con redes de cerco captura incidentalmente más de 100 especies que no son objetivo, y la mayoría muere en las redes. Del total de lances cerqueros que se realizan en aguas costarricenses, alrededor del 70% tiene impactos incidentales de pesca sobre otras especies (Cuadro 3).

Los delfines, tiburones, rayas y mantarrayas, dorado, marlines y pez vela se encuentran entre las especies más afectadas (Cuadro 4). Entre los delfines costeros (manchado costero y spinner costero), se ven afectados exclusivamente dentro de las primeras 60 millas náuticas.

Estas son poblaciones de pre-subespecies de estos delfines restringidos principalmente dentro de las primeras 60 millas náuticas, como se puede ver en las capturas observadas (Tabla 4). De esta forma, si se protegen las primeras 60 millas náuticas de pesca con cerco, con ellas se asegurará la supervivencia de los túnidos asociados a estos rebaños, así como el resto de fauna que existe en esta franja costera ”.

Un párrafo bien escrito, escrito por un profesional en derecho en lugar de ciencia con toda la delicadeza del mejor mago de manos. Para alguien que no lo sepa, parece genial, protegería a los delfines. Una consulta rápida con el CIMAR de la Universidad de Costa Rica, (el departamento de ciencias oceánicas) le habría informado sobre las súper manadas de delfines giratorios, manchados y comunes que habitan en todas las aguas territoriales costarricenses. Estos delfines se ven constantemente afectados por los barcos atuneros de cerco.

La adición de áreas protegidas en nuestras aguas costeras ha hecho que la industria del atún sea más eficiente. Su tasa de captura promedio por lance de red ha aumentado de alrededor de 12 toneladas por lance en 2014 antes de la zonificación a casi 20 toneladas por lance en 2019. La ordenación del océano y la zonificación funcionan.

Siguiente: Parte 2, Los efectos de la industria del atún en las comunidades costeras

Todd Staley ha dirigido operaciones de pesca deportiva en Costa Rica durante casi 30 años y trabaja en la conservación marina. Actualmente es Communications Director en FECOP, la Federación Costarricense de Pesca (www.fecop.org), es miembro del Consejo Centroamericano de la Asociación Internacional de Pesca Deportiva y supervisa la operación de pesca en Crocodile Bay Resort.